Homes Igualitaris: «Si queremos más hombres cuidadores, cambiemos las reglas de los juegos»
Por: Rubén Reyes Jirón.-
En Nicaragua, donde yo nací y crecí casi toda mi vida, antes de venir a vivir a Cataluña hace dos años y medio, cuando éramos niños, nos gustaba jugar como si fuéramos hombres o héroes de películas, que para nosotros era lo mismo.
Solíamos imitar combates de boxeo o de kárate. Mi primo y yo, después de haver mirado en el cine una peli de Bruce Lee o Jackie Chan, nos lanzábamos a hacer “combates” de KungFu. Incluso, con los otros niños del vecindario, muchas veces jugamos a la guerra entre nosotros.
Los juegos que jugábamos de pequeños estaban entre los primeros espacios de socialización y división de género. En casa, las personas adultas siempre vigilaban que las niñas y niños jugáramos por separado.
Cuando las niñas jugaban a ser madres o enfermeras y así aprendían a cuidar a otros, los niños jugábamos a la pelota, a pelear y hacer la guerra. Además, a pesar de la vigilancia de los adultos, a veces jugábamos juntos niños y niñas. Entonces, los niños hacíamos el papel de padre que salía a trabajar y ganar dinero para la familia, a la vez que las niñas eran la madre que se quedaba en casa para cuidar de “los niños” y hacer las tareas del hogar. En estos juegos de roles, las niñas utilizaban sus muñecas y muñecos. Ellas eran las que jugaban a cuidar de “nuestros hijos”, nunca los niños jugamos a bañar o poner a dormir a los muñecos.
Quizás algunas cosas hayan cambiado actualmente, pero hace unos años constaté que esta “división sexual” de los juegos infantiles seguía intacta.
Haciendo talleres con hombres, muchas veces oí a algunos participantes diciendo que nunca dejarían que sus hijos jugaran con una muñeca porque temían que este juego pudiera inducir a sus hijos hacia la homosexualidad. Así pues, se puede suponer que los juegos infantiles siguen siendo espacios de socialización de género: que cuando las criaturas juegan, las niñas siguen aprendiendo a cuidar, y los niños a ser hombres típicamente machistas y violentos.
Si queremos que los niños de hoy lleguen a ser hombres con la capacidad de cuidar a otros y con la posibilidad de ser buenos padres, debemos cambiar las reglas de los juegos infantiles, para que los niños también puedan jugar a cuidar de otros.
Rubén Reyes Jirón
Homes Igualitaris (AHIGE Catalunya)
https://www.homesigualitaris.cat/