Entrevista a Ona Carbonell

 

“Todo el que tenga un sueño, puede conseguir lo que se propone”

Asha Miró
Abril’15

Ona Carbonell ha entrado de lleno en nuestras vidas, cautivándonos por su belleza física, pero sobre todo para tener un alma resplandeciente. Desde el momento que la conoces, te roba el corazón por su sencillez y por su mirada nítida. Se convirtió en la protagonista del Mundial de Barcelona consiguiendo siete medallas soñadas, deslumbrando a todos. Y ahora vuelve triunfante de París, después de haber conseguido la medalla de oro en la prueba individual libre de natación sincronizada.

Desde muy pequeña hiciste danza, ballet clásico. ¿Cómo llegó la natación a tu vida?
Desde muy pequeña hacía gimnasia rítmica y me dormía haciendo el espagat. En los veranos de pequeña en Menorca, me pasaba horas y horas sin salir del agua. Cuando descubrí la sincronizada, uní mis dos pasiones: el agua y la danza.

¿La familia es para ti un puntal muy importante?
Yo no habría llegado hasta aquí sin el apoyo familiar. Mis padres siempre me han acompañado en donde yo he querido estar. El deporte de élite es muy sacrificado y muy duro y, este apoyo te ayuda a superar todos los retos.

¿Quién ha sido tu referente deportivo?
Creo que no ha sido una persona, sino que son muchas. En definitiva, todos aquellos deportistas que han llegado a la élite mundial y olímpica. Yo como medallista olímpica sé todo el esfuerzo que supone y esto es ejemplar.

¿Puedes definir que es el éxito para ti?
El éxito es conseguir algo por lo que has luchado mucho y mucho. El éxito no llega a la primera, t’entrebanques muchas veces antes de conseguirlo.

¿En qué momento de esta carrera fulminante que llevas has tocado el cielo?
Hay dos momentos importantes. Uno fue cuando ganamos la medalla plata con dúo y el bronce del equipo en Londres. Yo era muy jovencita y fue increíble! El segundo, en el mundial de Barcelona consiguió siete medallas. Ninguna mujer las había conseguido. Hacerlo en casa y sola, en un momento difícil, fue una experiencia increíble.

¿Crees que existe la suerte?
Creo que la suerte se puede crear, si uno lucha por algo.

Cuéntanos un poco un día de tu vida.
Me levanto a las siete y hago un desayuno energético. A las ocho empiezo preparación física. Luego, a veces tengo una hora de ballet. Más tarde, de diez a dos, estoy en el agua hasta la hora de comer. Después de comer, de cuatro a ocho, más agua. A veces termino antes para ir a la universidad, donde hago el último año de diseño de moda.

¿Cómo os invención las coreografías?
Elegimos una música y hacemos talleres de improvisación. Va sonando la música horas y horas y nosotros vamos haciendo movimientos. Al final es nuestra entrenadora la que escogiendo las mejores coreografías. Incluso tenemos músicos que nos adaptan la música en nuestra coreografía.

¿Cómo se siente la música debajo del agua?
Majestuosa, amplificada. Tenemos un aparato subacuático con que lo escuchamos todo perfecto.

Cuéntanos lo de diseño.
Siempre me ha encantado el art. De hecho, la natación sincronizada es uno de los pocos deportes olímpicos que tiene una parte artística. Justamente, coincidió que encontré una universidad que hacía diseño nocturno, y me apunté. He podido diseñar mis propios bañadores y los de la selección, y eso es increíble. Me encanta la carrera y me gustaría más adelante poderme dedicar.

¿Qué aportarás tú a la moda de ahora con tus diseños?
Como deportista me gusta mucho ropa cómoda, informal pero con un toque bonito, que te haga sentir guapa vez que vas cómodo. No tengo ni idea de si acabaré diseñando mi propia línea, pero sí tengo claro que me gustaría estar en el mundo del diseño.

¿Qué consejos darías a las generaciones futuras?
Todo el que tenga un sueño, puede conseguir lo que se propone. Yo nunca en la vida me hubiera imaginado llegar a donde estoy ahora. El secreto está en trabajar con ilusión.

Eres una mujer viajera. ¿Cuál es el país que más te ha fascinado?
Después de los juegos olímpicos fue la primera vez que tenía un mes y medio de vacaciones y, con mi pareja nos fuimos dos meses en la India. Primero hicimos Nepal, después bajamos hasta el sur de la India a ver la Fundación Vicente Ferrer. Es un país con muchos colores, con muchos sabores, con gente increíble, que todo el mundo sonríe. Me encantó.

¿Como ven nuestra ciudad los de fuera?
Creo que como a mí, a la gente de fuera les encanta Barcelona. Es una ciudad con mucho turismo y culturalmente muy rica. Tiene un clima envidiable, tiene mar, tiene montaña. Culinariamente somos unos de los mejores del mundo. Lo tiene todo.

A nivel de deporte, como la ves posicionada?
Es una ciudad con grandísimos deportistas. Hay muchos centros que trabajan para crear una base más sólida. En el tema de la natación sincronizada, lo que todavía nos falta, es crear una mejor base en comparación con nuestras rivales rusas o chinas.

Como ves el deporte femenino de nuestra casa?
Creo que ahora recogemos los frutos de muchos años de trabajo.
Un ejemplo fue las olimpiadas de Londres donde casi todas las chicas conseguimos medallas.

¿Cuál es tu lugar preferido de nuestra ciudad?
Yo vivo en Vallvidrera y me encanta ver la ciudad a mis pies. Me gusta la zona de Barrio Gótico, del Borne, ya tiene mucho movimiento, hay mucha vida.

Una visita que nadie se puede perder de nuestra ciudad.
La Sagrada Familia la de ver todos. Es magnífica!

Si hicieras un paseo por Barcelona, qué ruta harías?
Siempre pienso, que un día haré de turista de mi propia ciudad. Una ruta que me gusta es ir bajando desde la montaña por toda la ciudad hasta llegar al mar.