La implantología dental
La implantología dental es la técnica que tiene como objetivo la sustitución de los dientes perdidos mediante la colocación de implantes dentales. Para conocer mejor esta técnica hay que tener en cuenta diferentes aspectos:
¿Qué son los implantes dentales?
Son como unas raíces artificiales creadas para sustituir los dientes que se han perdido. La principal característica es que se pueden integrar en todos los tejidos naturales de la boca sin causar ningún tipo de reacción extraña al organismo.
Hay que tener en cuenta que después de la cirugía hay un proceso de osteointegració –es decir, la conexión entre el hueso y la superficie del implante–, que acostumbra a durar tres meses. A partir de aquí es cuando el implante queda muy unido al hueso y, por lo tanto, ya puede aguantar una prótesis que tiene que hacer las funciones de un diente natural. Hay que destacar que los implantes dentales son tratamientos de larga duración.
¿De qué están hechos los implantes dentales?
Actualmente están fabricados de titanio químicamente puro, tratados de forma especial para garantizar la osteointegración en el hueso.
¿Son todos los implantes dentales iguales?
No todos los implantes dentales son iguales y, por lo tanto, no todos se osteointegran con la misma calidad ni responden igual a las fuerzas cuando se mastica. Es decir que los resultados a corto y largo plazo varían según el implante que se coloca.
Las diferencias más significativas entre los tipos de implantes son:
– Tipo de aleación de titanio. Los implantes de mayor calidad son aquellos que tienen una aleación de titanio de grado 5.
– Tratamiento de la superficie del implante.
Estos dos factores influyen en la calidad del implante y, a la vez, condicionan su precio final.
¿Cómo se realiza el procedimiento en el tratamiento de los implantes dentales?
Cada tratamiento tiene que ser personalizado según el paciente. En líneas generales, sin embargo, se siguen los siguientes pasos:
1. Estudio y exploración inicial para planificar el tratamiento y tipo de procedimiento quirúrgico.
2. Fase quirúrgica (vendrá determinada por la planificación previa). Puede implicar una o más intervenciones quirúrgicas.
3. Fase protésica o restauradora. Una vez el implante dental está correctamente osteointegrado, se coloca la prótesis sobre el implante dental.
Para garantizar una correcta osteointegración se tiene que procurar tener una buena higiene y controlar los problemas periodontales, para no sufrir infecciones; se tienen que evitar las cargas sobre los implantes; y tampoco se tiene que fumar, porque acostumbra a provocar problemas.
Una vez se coloca la prótesis, el paciente necesitará rehabilitación para adaptarse a la nueva situación estética y funcional, puesto que puede ser compleja.
4. Fase de mantenimiento (muy importante para garantizar que los implantes duren). Se realizan controles periódicos y se tiene que mantener una higiene en la zona del implante para evitar problemas.
¿Es imprescindible la fase de mantenimiento de los implantes dentales?
Esta técnica es estable y segura a lo largo del tiempo, siempre que haya un control y mantenimiento para prevenir la aparición de cualquier tipo de problema.
Los protocolos de control y mantenimiento están destinados a:
– Evitar la contaminación bacteriana de los implantes dentales.
– Evitar los desajustos de las prótesis causados por la función masticadora.
– Evaluar los resultados del tratamiento.
Carlos Galindo García, Director Médico
Clínica Dental Galindo · www.dentalgalindo.com
